Advertencia para curiosos

Esto no es un blog pro-ana ni pro-mia, ya que ni siquiera yo lo soy. Sé perfectamente lo que es la anorexia y la bulimia y creedme que no es algo que desee para nadie. Éste es un blog para hablar de mí, de mi problema, nunca para meter a más personas en ello, más bien al contrario. Quedais todos avisados, tanto wannabes que quieran consejos como personas dispuesta a insultarme por lo que padezco. Aqui no encontrareis lo que buscais.
A los demás: bienvenidos principes y princesas.

viernes, 25 de diciembre de 2009

Odio la navidad

Lo odio. Odio esta maldita sensación. No puedo soportar mi estomago lleno.
Siento tanto asco que creo que podría morir de él. Solo quiero vomitar, vomitar y vomitar.
Me odio, odio todo mi mundo. Doy asco.
Solo pienso en desaparecer.
Realmente, odio la navidad.

Al otro lado del espejo

Me senté frente al cristal un día,
y evoqué ante mí una imagen desnuda,
negando las formas de la alegría y la razón,
aquella sombría figura fue reflejada allí:
La visión de una mujer, exhalando
salvaje y femenina desesperación.

Su cabello caía hacia atrás en ambos lados,
el rostro, privado de toda hermosura,
ya no tenía envidia para ocultar
lo que ningún hombre supo adivinar,
y formó entonces su espinosa corona
de áspera y profana desgracia.

Sus labios estaban abiertos, ni un sonido
brotó de esos marchitos pétalos rojos,
cualquiera haya sido, aquellas deformes heridas
en silencio y secreto sangraron.
Ningún suspiro alivió su inexpresable dolor,
no poseía aliento para vaciar su miseria.

Y en sus espeluznantes ojos brilló
la moribunda llama del deseo de vivir,
hecha locura al diluirse toda esperanza,
y ardió en el fuego crepitante
de los celos y la sedienta venganza,
con una cólera que no puede apaciguarse.

Sombra de una Sombra en el cristal,
libera ya la superficie del espejo!
Pasa, como las fantásticas formas pasan.
No retornes jamás para ser
el fantasma de las horas vanas.
Entonces me oyó susurrar: "Yo soy Ella"

viernes, 11 de diciembre de 2009

Muñeca rota y perdida

Supongo que os preguntareis que fué de aquella princesa que alcanzó su meta y muerta de miedo se decidió a enfrentarse a la vida. En realidad no espero que os lo pregunteis, pero si estais leyendo ésto me consuela pensar que al menos tengo a alguien que me comprende.
Aquella princesa fue demasiado cobarde para dejar su antigua vida atras y por ello aun sigo por aqui. Sabía que pasaría, desde que tiré el primer plato: es una enfermedad crónica, está dentro de mi cabeza y no quiere salir. Sabía donde me metía y sin embargo solo pude dejarme llevar. El error es creerte más fuerte que ella, el error es pensar que "yo controlo". No sigas mi ejemplo, no te mientas a tí misma.
¿Y ahora qué? ¿Adelgazar hasta desaparecer?
Me siento tan desamparada que solo busco el desahogo y no explico lo que relamente me ha pasado, dejazme volver atrás.
Mi ultimo post contaba la absoluta felicidad que sentía al haber alcanzado mi meta. Todo fue coor de rosa las primeras semanas, ¡por fin podía dejar de sentir hambre! Pero claro, pronto me descontrolé y la sola idea de que pudiera coger algun gramo, después del esfuerzo que había invertido... No. No puedo. Es superior a mí. Estoy tan acostumbrada a vivir así que simplemente no puedo vivir de otra manera. Bueno, miento: soy demasiado débil para luchar por salir. Y creezme que lo intento, que cada vez que me miro al espejo y me veo como una foca pienso: no, es una imagen distorsionada, peso 45 kilos, no puedo estar así... Pero nada de eso evitará la culpabilidad cada vez que como.
Así que sin más remedio seguí por aqui, con mis carreras, mis ayunos, mi ansiedad, mis mia de vez en cuando... Hasta ahí pasable, pero ahora viene el GRAN problema: Mi madre me pilló tirando comida. Y es que era imposible guardarlo en secreto para siempre.
Después de eso, un viaje infernal a Roma en el que no podía ayunar y comía hidratos de carbono todos los días provocan la segunda pillada: me escuchan vomitar.
Y ya no hay vuelta atrás: saben que estoy metida en ésto, pero no sé hasta que punto. Sé que mi familia sufre con ello tanto como yo, pero no puedo evitar sentirme furiosa por meterse en mi vida. Tengo que comer por obligación y no quiero que me vuelvan a pillar vomitando y eso me hace sentirme mal, lo cual no ayuda mucho a mi ya de por si horrible cacao mental.
Y hoy ha intervenido otro factor contribuyente a rayarme la cabeza: la psicóloga. En teoria, la psicologa del colegio solo quería que le contara cosas de ana y mia porque estoy haciendo un
trabajo sobre ello y sé mucho (obvio, ¿no? xd). Vale, pero yo pienso: ¿y si mis padres le han dicho algo? Me incomoda de sobremanera la idea de que me puedan estar haciendo una terapia sin que yo me entere, no quiero que me coman la cabeza.

Y bueno, siento este enorme discurso que he soltado sin venir a cuento asi como contaros mi vida que dudo que interese lo más mínimo, pero necesitaba soltarlo todo.
Tambien siento no haber actualizado en tanto tiempo, no sentía animos para ello.

Aprovecho tambien para poner un breve comentario sobre el movimiento de portaaporta, intento defender nuestros blogs lo máximo que puedo cuando se saca el tema y me parece que ese movimiento es cínico y desinformado. Muchos de nuestros blogs nos ayudan más que perjudican y gracias a ellos he conocido a gente maravillosa que me a apoyado cuando nadie más podía hacerlo, gracias por todo princesas ^^.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

Meta cumplida

Y.... ¡¡Llegué!! El sueño que he perseguido durante tres años por fin está aqui y... Bueno no sé.
Me siento rara, la verdad. Realmente no me veo diferente. He adelgazado, eso está claro: lo noto mucho en las piernas, en el pecho... La gente me dice que estoy genial, que mi cuerpo es perfecto. Pero aun no estoy contenta. Me sé la teoria, sé como funciona ésto: nunca voy a estar contenta. Es como tirarse por una cuesta sin frenos, mientras esté bajando va bien, cuando llego al final... No podré parar.

Llevo unos días pensandolo y escuchando las broncas de los demás. Tengo miedo de que si lo dejo ahora vuelva a subir. No me veo capaz ahora mismo de salir de ésto, de volver a mi vida normal. Me atrae soberanamente la idea de seguir adelgazando, de llegar a 43. Pero la parte cuerda que hay en mí sabe que eso es justamente lo que debo evitar.

¿Qué haré? Pues realmente no tengo ni la más remota idea. De momento estoy disfrutando de la sensación de triunfo, de los sueños alcanzados. Estoy disfrutando de la primera vez en mi vida que me siento medianamente guapa.

lunes, 2 de noviembre de 2009

Test ^^

Mis 10 cosas honestas:
1. Me miento a mi misma con frecuencia.

2. Me faltan 200 gramos para llegar a mi meta y estoy euforica por ello, a la par que asustada. Empiezo a considerar otras metas, aunque había prometido no hacerlo.

3. Llevo un tiempo sin pareja, y me va haciendo falta.

4. A veces invento cosas de mi vida para que parezca interesante.

5. Odio que la gente sea feliz cuando yo no lo soy, soy una egoista y muy celosa.

6. Soy muy pesimisma, tengo una visión de mí misma totalmente negra y por eso intento resultar perfecta para los demás.

7. Tengo muchisimos miedos, pero delante de la gente finjo que soy insensible. Tengo miedo de mí misma y no me gusta enfrentarme a mis problemas.

8. Me creo superior a la gente y cuando me doy cuenta de que no lo soy me vengo abajo.

9. Busco a alguien que me quiera, pero no puedo demostrar a nadie que me importa. Siempre la cago con todo el mundo.

10. Soy Ana más por cabezonería que por otra cosa.

Saludos a la madre de alguien: Saludo a mi madre, por todo lo que sufre conmigo.

Mis nueve blogs nominados:

http://locanamia.blogspot.com/
http://mialovethin.blogspot.com/
http://unrinconparasoniar.blogspot.com/
http://mundopupura.blogspot.com/
http://arpiainfelizz.blogspot.com/
http://sumarsumarynorestar.blogspot.com/
http://tuyaxsiiempre.blogspot.com/
http://mundocriftalandia.blogspot.com/
http://princessedecristal.blogspot.com/

viernes, 30 de octubre de 2009

Gula



Gula, es el sexto de los pecados capitales. La abundancia de telas se debe a que la autora trata a este pecado, no solo respecto de la comida y la bebida, sino del consumo, en un significado mas amplio, tal como comprar y acumular cosas inutiles. Las uvas, bienes lujosos, las conecta con fiestas lujosas de tiempos antiguos. El color rosa le recuerda uvas, dulces, etc

martes, 27 de octubre de 2009


Cuando ya casi había alcanzado ese kilo... Volvi a engordar...¡Joder!

Tengo faringitis y me han mandado medicamentos que tengo que tomar con comida en el esestomago, resultado: tengo que comer tres veces al día. Asi que aqui estoy, no puedo hacer ejercicio porque me encuentro fatal y encima tengo que comer...

Estoy frustrada y gorda y harta de todo. Estoy deseando ponerme bien para hacer un ayuno en condiciones y llegar a mi meta de una puñetera vez. Mientras sigo por aqui, viendo buestros blogs, chateando cuando puedo y mentalizandome. Esto es solo un obstaculo en el camino, lo saltaré y seguiré caminando a la perfección.

viernes, 23 de octubre de 2009

Verso



Anorexia
Por: Antonia Alvarado
La veo saboreando aquel veneno,
y a pesar de lo repugnante que me parece,
la tentación es inminente.
No debo comer,no puedo hacerlo...
aquello ya no parece ser suficiente para mí;
y sin embargo,
sigo colgándome de aquella cuerda floja
con la esperanza de alcanzar mi meta.
Ser como ellas...
El sabor es mi enemigo,
y también lo son todas las consecuencias que aquello conlleva.
El espejo, el espejo me ayuda a ver la realidad.
Una realidad cruda,
pero verdadera...
lo que dicen los demás,
los que me acusan de tener la mente distorsionada...
todos ellos se equivocan.
Yo no soy perfecta...
Soy demasiado imperfecta como para alguna vez llegar a serlo...
Mi estómago se queja,
una y otra vez,
por la decisión que he tomado...
me reta a continuar con agudas puntadas y malestares,
pero yo no me daré;
por vencida.
Quiero ser como ellas...
Ellos no me comprenden.
Me miran con ojos asqueados sólo por querer ser como ellas.
Como ellas...
una princesa....
quiero volver a ser tu princesa.

sábado, 17 de octubre de 2009

¿Seré capaz?


Hoy me siento terriblemente mal.
La ansiedad me persigue y la culpa no me deja en paz.
Estoy a un kilo de mi meta y me siento perdida, insegura y aterrada. Tengo miedo de perder ahora todo lo que he conseguido, y tengo miedo de no poder parar a tiempo. Si lo consigo, si bajo ese kilo, querré más. Tengo miedo de perder el control más de lo que ya lo he perdido.
¿Podré volver a ser una persona normal cuando lo logre? Lo dudo mucho. Hoy salí y bebí algo de alcohol, y solo por eso no puedo evitar pensar que engordaré. ¿Qué será de mi vida si ni siquiera puedo salir de fiesta sin pensar en calorias y kilos?
No sé que me pasa. Me siento más débil e impotente que nunca. Solo quiero llegar a mi meta y luego salir de ésto. ¿Acaso seré capaz?

jueves, 8 de octubre de 2009

Carrera


Bueno, una pequeña victoria ^^ .
No puedo decir que no me haga ilusión (que me hace mucha) pero nunca participé pensando en ganar. Me quedo con los kilos perdidos y las motivaciones que gané. Tambien la gente a la que he conocido y contra la que he competido ^^. Y le quiero agradecer a Arpi que la organizara, ¡eres la mejor! *O*
Y si alguien sabe de alguna otra carrera que empiece dentro de poco por favor que me avise!! >.<

miércoles, 7 de octubre de 2009


En estos momentos de mi lamentable existencia es cuando más perdida me siento. Mientras espero a que mi madre se largue de una vez para poder tirar la comida y me desespero al vez que mi padre ha llegado antes de tiempo y ya no hay solución, me siento nostalgica pensando en tiempos anteriores, en las amistades que he perdido con el tiempo, en la gente que ya bajó de mi tren. En estos momentos en los que sufro por todo y en los que no sé nada, es cuando más sola me siento.
Entonces desearía ser más fuerte. Ser más fuerte para no sufrir cuando me obligo a olvidar todo lo que es mejor que deje atrás. Y tal vez sea porque cada vez estoy más confusa o por que no se lo que quiero. A veces desearía desaparecer...

Comprendo que le temas al espejo.
Lo miro de reojo, igual que vos.
Que esto no es lo suficientemente firme y curvo
y esto no está aún del todo plano.

Comprendo que le temas al verano.
Septiembre me preocupa como a vos.
La histeria de llegar a enero para gustarle al mundo entero,
para gustarle al rubio escultural.
¿A quién queremos engañar?

Si al final, nadie le escapa al tiempo.
Si al final, sólo trasciende lo que sos.
¿Quién es feliz siempre tratando de gustar?
La vida no me va esperar.
La vida no te va esperar.

Entiendo que te indigne el nuevo aviso
a mi me pone en llamas como a vos.
La modelo agradeciendo su belleza a un yogurt.
Y a vos, que no te cierran tus medidas.

Entiendo que te sientas aturdida.
A veces me confundo como vos.
El último bocado activa la culpa que traes escondida.
Y si ese chocolate te venció,
tal vez deba salir por donde entró.


Si al final, nadie le escapa al tiempo.
Si al final, sólo trasciende lo que sos.
¿Quién es feliz siempre tratando de gustar?
La vida no me va esperar.
La vida no te va esperar. (bis)

Entiendo que te sientas aturdida.
A veces me confundo como vos.

domingo, 27 de septiembre de 2009

Pain of love


Por una vez no escribo para hablar solamente de Ana, siento un dolor profundo que necesito espresar en forma de palabras.

¿Qué sentimiento podría albergar tanta tristeza? El amor. El estúpido amor.

Ultimamente en mi vida no había tiempo para pensar en el amor. Ana lo ocupaba todo. Ana me protegía del dolor a la vez que lo provocaba. El dolor físico no es nada comparado al emocional, que te marchita por dentro y te quita las ganas de vivir.

Ya casi no recordaba lo que era la rabia, la tristeza y el dolor. Bien, ayer lo recordé con toda la intensidad que es posible. El destino quiso que me reencontrara con una persona a la que amé con toda mi alma. Casi le había olvidado, casi no pensaba en él.

Mi obsesion con mi cuerpo ocupaba todo mi pensamiento, y en el fondo me ayudaba a olvidarlo. Pero una vez le tuve frente a mí todos los sentimientos volvieron, y con ellos el dolor.

El dolor de los celos, del amor no correspondido, del saber que estan jugando contigo. Es un peso que no puedo quitar dejando de comer. He sentido que he perdido el control de mí misma, que tanto me había costado conseguir.

Y ahora vuelvo a estar obsesionada y vuelvo a sufrir. Es lo que pasa cuando te enamoras de un cabrón. No se si quiero hablar con él o si quiero borrarlo de mi vida. Me siento impotente y eso me da miedo.

Volveré a centrarme en mí, a dejar el amor fuera de mi vida. Tal vez así encuentre la manera de no sufrir. Ana será mi única guía y objetivo, es la única que me da satisfacciones.

domingo, 20 de septiembre de 2009

La culpa






















El diccionario define la palabra “culpa “como “un sentimiento de responsabilidad o remordimiento por alguna ofensa, crimen o equivocación, ya sea éste real o imaginario”.


A veces es el sentimiento más poderoso.

Este fin de samana ha sido una muestra de lo obsesionada que estoy con Ana. He descubierto (sino lo había hecho ya antes) que soy incapaz de llevarme cualquier cosa a la boca sin sentir la más atroz de las culpas.

Como cada fin de semana, mis padres estan en casa y no tengo más remedio que comer delante de ellos. Entonces, ¡pum! Empiezo a pensar en kilos y calorias, empiezo a sentir nauseas, a marearme. Me miro en cada espejo y siento que cada minuto que pasa estoy más gorda. ¡Por amor de Dios, comí unas pocas verduras!

La culpabilidad es espantosa. Me reconcome por detro, me machaca. Tengo esa preciosa tentación de llevarme los dedos a la boca y librarme de todo... Solo sentir la arcada ya me reconforta. Oh, mi amada mía, ¿qué haría yo sin tí?

En fin, mañana empiezo la carrera de Kilos y me siento con mucha fuerza. Bajaré todas las calorias que pueda haber engordado en estos dos días y seguiré bajando hasta llegar a mi meta.

Un beso para todas mis preciosas princesas ^O^

jueves, 17 de septiembre de 2009

Un poco de mí

Primera entrada... y realmente no sé muy bien que decir.
Sé que tengo muchas cosas que quiero contar, pero no sé por donde empezar.
Empezaré por decir quien y qué soy, y el motivo por el que comienzo éste blog.

Se podría decir que soy nueva en ésto. No me malintepreteis, no soy una wannabe ni mucho menos. En realidad llevo casi toda mi vida con Ana y Mia a la espalda. Me refiero a que soy nueva siendo una princesa de la web. Sé que muchas de vosotras habreis conocido a Ana por internet. Bien, no es mi caso.

Dejazme que os cuente como entré en este mundo. Desde que yo recuerdo, siempre he estado acomplejada por mi peso. No sé exactamente si empezó cuando un niño idiota dijo que era gorda, o cuando una chica de mi clase insinuó que tenía una gran barriga. Ni siquiera recuerdo cuando fue la primera vez que oí hablar de Ana y Mia, ni cuando entendí lo que eran. El caso es que siempre han estado ahi.

Sin embargo, yo nunca he deseado ser anorexica o bulimica, como muchas a la que he leido, siempre entendí esto como una enfermedad y sigo haciendolo.

Siempre que pienso en como entré en esta locura recuerdo varios episodios de mi vida.
-Uno: la primera vez que fui a un campamento. Pesaba 50 kilos y tenía algo asi como 12 años. (Recuerdo cuanto pesaba porque, a pesar de no hacer locuras con la comida, tenía una gran obsesión con mi peso). Toda mi vida he odiado la comida de mi colegio y la de aquel campamento no era mucho mejor. Comía lo menos posible por el simple hecho de que aquella bazofia no era comestible. Resultado: cuando volví a mi casa, 15 días después, había adelgazado 5 Kilos, pesaba 45. Desde entonces, la sensación de adelgazar me atrapó y quise más.
-Dos: recuerdo una historia sobre bulimia que escribió una chica en un foro. Me metí por curiosidad (cualquier cosa que tuviera que ver con mi ansia de adelgazar me intrigba, a pesar de que yo sabia perfectamente que aquello no era bueno) y comence a leerla. He de reconocer que era una buena historia, que me enganchó, sin embargo daba algunas ideas que me perjudicaban bastante. Siempre me había sentido culpable al comer, y al leer la historia empecé a sentirme atraida por Mia. Muchas veces fui al baño, me incliné sobre el retrete, me lo pensé mejor y abandoné la idea. Sin embargo la tentación siguió alli.

Esos dos episodios marcaron el comienzo de mi deterioro, pero sin duda no el final. Dejé por completo los dulces y empecé a hacer mucho deporte. Tambien ayudó que estuviera creciendo. Adelgazaba a la vez que crecia, por lo que mi peso no variaba: me mantenía en los 45 Kilos, sin hacer cosas insanas. Llegó un momento en que me volví más delgada que las demás chicas de mi clase (incluidas las que se había reido de mi por mi peso) y eso me hizo sentirme bien, guapa y superior a ellas. Estar delgada para mí se convirtió en sinonimo de triunfo.

El problema empezó cuando dejé de crecer. Al ir adelgazando me había vuelto más descuidada. Me permitía ciertos caprichos de vez en cuando, que poco a poco se hicieron habituales, a la vez que cada día hacía menos deporte y ya no gastaba materia en crecer. Mi peso subió: de mis 45 habituales pasé a 50, a 55, a 57... Ya no era la más delgada de mi clase, mentía sobre mi peso por verguenza y me sentía dolorosamente gorda.

De nuevo Ana y Mia estaban alli llamandome y esta vez no podía negarlas. Intenté hacer dieta (una normal, simplemente reducir dulces y demás) pero no bajaba como yo quería. Leí libros sobre anorexia y bulimia y, aunque siempre les he tenido miedo, empecé a verlas como una solución. Había días en que para evitar la culpa me provocaba arcadas (sin llegar a vomitar) y me saltaba comidas, al principio bastaba con eso. No bajaba lo suficiente de peso.

Me fui obsesionando y aunque sabía que no debía hacerlo fui callendo. Al principio solo fue Mia y de vez en cuando (me costaba mucho conseguir vomitar) y luego contar calorías, saltarme las comidas más a menudo hasta casi no comer... Empecé a adelgazar, por fin, llegué hasta los 51, pero no había manera de llegar a mis 45.

La gente me decía que yo no estaba gorda, estaba normal. ¡Yo no quería estar normal! Quería volver a ser delgada! No podía hablar con nadie de ésto. Entonces comencé a meterme en internet, y os encontré a vosotras. Gente con mi problema, con distintos matices, pero que me comprendía. Y comencé a leeros, muchas veces pensando en que leía locuras, pero al fin y al cabo son mis propias locuras. Entonces supe mucho más de lo que me pasaba, y me enteré de cosas que nunca había oido: las wannabe, los tips... Tras un tiempo leyendo, empecé a participar y aqui estoy.

Ahora sé que no me libraré de Ana ni de Mia, al menos hasta llegar a mi meta. Entonces ya veremos si puedo dejarlas. De momento me conformo con lo que tengo.